Muchos de vosotros cuando os vais a operar nos hablais de vuestros miedos al quirófano ante por ejemplo, una cirugía plástica. Para los que trabajamos a diario en quirófano nos sigue sorprendiendo. Es tan solo el miedo a lo desconocido. Por eso hemos pensado que estaría bien explicar cómo es el proceso.
Actualmente y por el tema de COVID todo empieza con la realización de una PCR 3 días antes. Se trata de asegurarnos que no estás infectad@ en el momento de operarte.
El día de la operación tendrás que ir a la Clínica a la hora que te indiquemos y dirigirte a la recepción de la Clínica. Allí se lleva acabo el proceso de admisión del paciente. Te pedirán la documentación y hay que firmar unos papeles de protección de datos. El personal de recepción te acompañará a la habitación.
Una vez en la habitación la enfermera te pedirá todos los papeles (estudio preoperatorios, consentimientos), tomará las constantes vitales (temperatura, tensión arterial), preguntará sobre alergias, medicamentos, intolerancias alimentarias y te dará una medicación (un tranquilizante y un protector de estómago). Tendrás que cambiarte y ponerte el kit para bajar a quirófano: bata, mascarilla, gorro, polainas y la típica ropa interior «sexy» de hospital.
Luego vendrá un celador a llevarte en camilla desde la habitación a quirófano un celador. Una vez allí te estará esperando la enfermera de pre-anestesia. Te pasará a una sala donde el anestesista hablará contigo y revisará una vez más tu Historia Clínica. Aquí te colocarán un suero, mediante un pinchacito similar a cuando te extraen sangre para un análisis. Ésta va a ser la única vez que te van a pinchar. Todos los demás calmantes, analgésicos, etc. los pondrán en el suero.
Entonces pasarás con la camilla al quirófano. Allí estaremos todo el equipo. Una cosa que te sorprenderá es el número de personas que hay durante la operación: anestesista, enfermera de anestesia, cirujano, ayudantes del cirujano, enfermera instrumentista, enfermera de campo…todos pendientes de ti. Verás que parece un puesto de la Fórmula 1: todos preparando algo al tiempo.
¿Frío? Sí, en quirófano hace frío porque los microbios son amantes del calor y a nosotros no nos gustan los microbios. Pero no te preocupes pues es un aspecto que cuidamos en todo momento y haremos que tu te sientas cómodo/a. Asi que te pondremos mantas y un calefactor de aire caliente.
Ya en el quirófano te anestesiarán. Técnicamente se llama la inducción, lo que significa que te irá entrando una sensación de sueño cada vez mayor. Es entonces cuando estás totalmente dormido cuando empieza nuestro trabajo.
Cuando la operación finaliza despertarás del mismo modo, poco a poco, y de nuevo nos encontrarás a nosotros. Ya llevarás la herida tapada con el vendaje o apósito que precises. El cirujano llamará a tus familiares para explicarles como ha ido todo, pero tu todavía permanecerás en la zona de reanimación donde una enfermera vigilará que todo evoluciona según lo previsto, que eliminas totalmente la anestesia y te recuperas para pasar a tu habitación.
Os animo a que nos preguntéis todas las dudas que os puedan surgir. Así como os animo a los que ya habéis pasado por esta experiencia que la compartáis con todos nosotros dejando un comentario para que los demás puedan leerlas y vayan perdiendo ese miedo a lo desconocido: ¿cómo fue tu experiencia en quirófano?
Trabajó en el Hospital Clínic de Barcelona donde trabajó como especialista en Cirugía Plástica y reparado durante 16 años.
Hace ya 15 años, fundó junto con dos profesionales más, Antiaging Group Barcelona, en la vanguardia de la Medicina Y Cirugía Estética. Se ha desarrollado profesionalmente en campo asistencial, investigador y docente, siendo sus campos de interés la cirugía facial, la cirugía mamaria y contorno corporal con implantes.
En cirugía de la mama es especialista en aumento de mamas transaxilar y cirugía secundaria de la mama. Ha introducido el uso de ecografía en Cirugía Plástica y recientemente el uso de implantes 3D en malformaciones torácicas.
