Matisse no tenía alteraciones de la vista cuando retrató a su mujer, simplemente estaba experimentando con el color como una nueva forma de expresión. El cuadro me sirve para adentrarme en la corrección de imperfecciones de la piel post-tratamiento médico-estético como rojeces post-operatorias, angiomas, cicatrices, hematomas…
Una de las preocupaciones más frecuentes de nuestros pacientes es si después del tratamiento realizado serán visibles las zonas donde hemos infiltrado, disparado con el láser o si hay cicatrices. Partiendo de la base de la biología de la curación de las heridas existen tres fases: fase inflamatoria, proliferativa y remodeladora. En cada una de ellas el color de la zona tratada va a ir variando y eso lo podemos disimular y mejorar.
Afortunadamente disponemos de un arsenal extenso a nivel de tratamientos tópicos como son los quelantes para los hematomas, la silicona para las cicatrices, el ácido azelaico para las rojeces, el ácido kojico para las manchas marrones y un extenso etc. pero en ocasiones esto no es suficiente y debemos disimular el color.
Los teóricos del color ya lo tenían claro cuando hablaban de colores primarios y complementarios: los azules se contrarrestan con los amarillos y los rojos se contrarrestan con los verdes. Y esto nos sirve a nosotros para maquillar aquellas cicatrices todavía rojo-lilosas, eritemas postoperatorios, angiomas…con correctores verdes que aplicamos antes del maquillaje. En el caso de los hematomas o bien las ojeras pronunciadas donde el color azulado es el dominante, el corrector amarillo es el que nos servirá para cubrirlos.
La mayoría de empresas farmacéuticas dedicadas al maquillaje para pieles atópicas y sensibles disponen de sticks y pinceles correctores que son una gran ayuda para nosotros pues nos ofrecen una forma elegante de corregir imperfecciones tras un tratamiento médico-estético de manera simple y segura.
Asi que a la pregunta de ¿me va a salir algún morado o voy a ponerme muy roja? Si la respuesta es positiva, tranquil@s, también incluye una solución mientras se resuelva la alteración cutánea con los correctores de color. ¡Ya no hay excusas!
Se inició en el campo de la Medicina y la Cirugía Estética en 1999, creando el grupo de Medicina Estética de Antiaging Group Barcelona en 2004, y responsable del área de Láser desde 2006.
Actualmente profesora del Máster de Medicina Estética y del Bienestar del IFMiL (Institut de formación Mèdica i Lideratge), con la colaboración de la Universitat de Barcelona y del COMB (Colegio Oficial de Médicos de Barcelona).
Participa en diferentes líneas de investigación y publicaciones científicas.
