La cirugía de pómulos, junto a la cirugía de mentón y a la rinoplastia, es una de las cirugías estéticas orientadas a la armonía facial. Los pómulos son los huesos que proyectan la parte de la cara conocida como mejillas. Los pómulos son uno de los 3 factores del triángulo de la belleza. Existen 2 tipos de cirugía estética de pómulos:
1. Aumento de pómulos
La cirugía estética de aumento de pómulos tiene como objetivo realzar la zona periorbitaria e incrementar el óvalo de la cara. Está especialmente indicada en personas que tengan un malar (hueso que esta a nivel de pómulos) poco desarrollado. También se puede realizar en conjunción con la rinoplastia y con el lifting.
Lo más habitual es la colocación de un implante por delante del pómulo para aumentar su proyección. Otra forma de aumentar la proyección del pómulo es el lifting de tercio medio, que permite levantar y dar volumen con el propio tejido, sin necesidad de usar implantes.
El relleno con grasa (lipoinyección o lipofilling) es otra buena opción para dar volumen a esta zona y es la que más se utiliza porque es menos traumática para la zona y la hinchazón postoperatoria dura menos tiempo.
2. Reducción de pómulos
En ocasiones hay que reducir el pómulo porque está muy desarrollado y da un aspecto demasiado oval a la cara. La operación es similar a la anterior pero en vez de colocar una prótesis se reduce el pómulo reduciendo su proyección pero manteniendo su forma.
La cirugía estética del mentón nos permite dar al rostro de nuestros pacientes una nueva armonía facial, dotando al rostro de una belleza rejuvenecedora manteniendo la naturalidad y el equilibrio con el resto de rasgos.